Seguro que has visto fotografías espectaculares de la luna en alguna ocasión, pero puede que te hayas llevado una decepción si lo has intentado y el resultado obtenido no es el que esperabas. Si sigues los consejos que voy a dar, en las siguientes líneas conseguirás, hacer fotos a la luna de una manera sencilla, y con unos resultados magníficos.
1º Elige bien la hora.
Para hacer fotos a la luna no necesitas una hora especial; tan solo que la luna esté visible. Puede parecer que la luna tiene un tamaño mayor cuando se encuentra próxima al horizonte, pero es más bien un efecto óptico, a excepción, de cuando la tenemos, en perigeo, más conocida popularmente como (superluna) que es más grande y brillante, porque se encuentra más cerca de la tierra, esto ocurre aproximadamente cada 13 meses.
2º Además, el hecho de que el cielo no salga completamente negro, le da un atractivo adicional a la foto.
utiliza la medición puntual. Si tu cámara lo permite, utiliza el modo de medición puntual de la luz. las fotos de la luna son uno de esos casos en los que viene muy bien disponer de este modo de disparo, ya que la medición matricial o promediada, que suelen tener seleccionadas las cámaras por defecto, engañarán a la cámara y probablemente la luna salga quemada.
Al estar el cielo muy oscuro, el medidor de la luz promedia y la luna puede salir como una bola blanca uniforme, perdiendo cualquier detalle de su superficie. Si tu cámara no permite la medición puntual, puedes utilizar otros modos de medición. Simplemente tendrás que realizar alguna que otra prueba hasta conseguir buenos resultados. Prueba a ajustar la exposición (baja el EV) para que la cámara subexponga, con ello evitarás quemar la luna.
3º Revisa el Histograma.
La mejor manera de comprobar que la foto está correctamente es revisar el histograma después de disparar.
Analiza el histograma y asegúrate de que las luces no queden en ( la parte derecha del gráfico). Si tu cámara dispone de un modo de consulta en el que las zonas quemadas de la foto parpadean, te resultará muy útil para comprobar si alguna parte de la foto se ha quemado.
4º Elige la mayor Distancia Focal que Puedas.
Haz zoom al máximo con tu cámara. Cuanto mayor sea la distancia focal, más grande saldrá la luna. Bastante pequeña se ve a simple vista, como para que la hagamos más pequeña aun utilizando focales cortas.
5º Enfoca al infinito.
La luna está muuuy lejos.Fuerza el enfoque de la cámara para que ésta enfoque al infinito. Si la cámara lo permite, coloca el modo de enfoque en posición manual para que quede fijado al infinito.
Si no tienes la opción de enfoque manual o no sabes cómo utilizarla, intenta enfocar con la cámara en modo automático.
Es probable que al hacerlo el sistema se vuelva loco y no consiga enfocar. Busca entonces algo que esté lo suficientemente lejos, enfócalo, y manteniendo el punto de enfoque apunta a la luna y dispara con tu cámara.
6º Usa una velocidad de disparo lo suficientemente rápida.
Como la luna está tan lejos, por mucho que lo hayamos estudiado de pequeños, se nos olvida que la luna está en movimiento. Gira lentamente alrededor de la Tierra. Pero no tan lentamente como para que la luna no salga movida si no tenemos.
Una velocidad de 1/160 debería de ser suficiente como para que no salga movida. A partir de ahí, si utilizamos una focal muy larga, tendremos que utilizar una velocidad aún más rápida, para que la foto no salga trepidada por nuestro propio pulso.
(JOTAENEGE) nos recomienda empezar con f:8 y 1/125 par ISO 100 como punto de partida para iniciar pruebas.
Permite capturar los detalles y no quemar la toma. Un punto más de diafragma da un tono más sepia, y un punto menos, más blanca.
7º Para finalizar esta nueva entrada, es aconsejable tener, un punto de referencia, un árbol, una montaña, el horizonte cuando sale, o se oculta, etc. así tendremos el efecto óptico de ser una luna más grande.
Permite capturar los detalles y no quemar la toma. Un punto más de diafragma da un tono más sepia, y un punto menos, más blanca.
7º Para finalizar esta nueva entrada, es aconsejable tener, un punto de referencia, un árbol, una montaña, el horizonte cuando sale, o se oculta, etc. así tendremos el efecto óptico de ser una luna más grande.
